El superpajillero liliputiense es complicado que sienta pero imposible que piense...



El pornocivilizado
se indigna si escucha: ¡Dios!,
porque siempre marcha en pos
de un onanismo ilustrado
diminuto y apretado
donde no caben los dos.

Jesús María Bustelo Acevedo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...